martes, 26 de octubre de 2010

SI NO ACABA CON LA GUERRA, NO ES UNA VICTORIA

“Si no acaba con la guerra, no es una victoria”. Michel Eyquem de Montaigne. El domingo, se realizó la Asamblea Municipal de Acción Nacional, en nuestra siempre Bella Perla del Altiplano, el resultado para cuando usted lea estas líneas, no será noticia si no historia; pues los rotativos locales habrán dado cuenta de los hechos y de los dichos.
En el Facebook de Civilitas, nos han dejado mensajes que vitorean el triunfo de Víctor Mendoza, como si se tratará de la elección más importante del panismo, amén de que también se nos menciona como “voceros de la presidencia”; esto nos preocupa porque hasta donde sabemos el “vocero oficial” es Héctor Nava, esperemos no recibir comentarios poco agradables de parte de él.
Cuando se nos concentramos en un solo árbol y nos olvidamos del bosque, estamos perdidos. El problema del panismo en Matehuala, la siempre Bella Perla del Altiplano, no es cuál grupo tiene el control del Instituto Político, sino más bien que está perdiendo posicionamiento por la división interna, que dejó de ser asunto privado. Para convertirse en controversia pública. Lo hemos dicho por que escrito está, prueba de ello lo encontrará, amable lector, en los rotativos locales; pero sobre todo en los comentarios de sobremesa, tanto en casa como en los restaurantes de la ciudad.
¿Pueden afirmar los azules, que salieron como un solo hombre, fortalecidos del proceso interno? ¿Pueden decir, que las heridas han cicatrizado? ¿Pueden contundentemente decir “estamos preparados pera el 2012? Son preguntas, se las dejamos a su consideración, amable lector. Sobre todo porque , hoy por hoy, vemos que los resentimientos y los abismos, en vez de disminuir se están acrecentando, parece que la diplomacia, es una herramienta de políticos anquilosados. En lugar de abonar el terreno, para que la semilla del diálogo fructifique, los azules erosionan el suelo con intrigas y rencores.
Una vez concluido la etapa de las Asambleas Municipales, no sería extraño que se reunieran todos los matehualenses candidatos al consejo, porque tal vez lo ignore; pero hubo matehualenses como Malaquías, Dr. Faustino, Lili, Barbosa y Sonia; que buscaron su oportunidad y la obtuvieron en otros municipios. Pero eso no es todo, aquellos que no salieron triunfadores en las Asambleas Municipales, tienen todavía la oportunidad, de acuerdo a la convocatoria, de buscar la oportunidad de ser propuestos por el comité Directivo Estatal, pero enfrentan un problema, son muchos.
En San Luis capital, no se realizó la Asamblea Municipal, porque no se cumplió con la regla de que se registrarán para participar la mitad más uno; primero porque el desánimo es grande y segundo, porque los grupitos de interés, prefirieron que no se realizará la tan mencionada Asamblea Municipal. En lugar de buscar el voto de los azules, prefirieron convertirse en propuesta del Comité Directivo Estatal, quien tendrá que decidir a quién proponer.
El asunto de la división interna, no es fácil ni exclusivo de Matehuala; se percibe en todo el estado potosino; por eso afirmamos que difícilmente se encuentran preparados para enfrentar el reto del 2012. Los colorados, aunque también tienen pugnas, han sabido manejar una imagen de unidad, con su bemoles; pero al final de cuentas unidad.
El reto azul, no es el celebrar la “fiesta democrática” para los medios, es demostrar con hechos que tienen propuesta, estructura y sobre todo los mejores hombre y mujeres para los diferentes cargos. Puede ser que se tenga propuesta; pero sin estructura y unidad entorno a sus principios doctrinales respetando sus Estatutos y Reglamentos, es ocioso pensar que refrendarán las posiciones que hoy por tienen, ni lo obtendrán en las que perdieron. Esto es una gran verdad.
Es un hecho que las prácticas azules, son más parecidas a las usadas por los colorados de antaño y las de estos son más parecidas a las utilizadas por los viejos azules. El ambiente que se sintió en el evento realizado el pasado domingo así lo demuestra. Hubo comentarios, en pasillos y corrillos, que se realizaría una “purga“ en el Palacio Municipal, de aquellos que no votarán por el actual alcalde; así como también se vertieron comentarios en el sentido que se compraron votos con chorizo y asado, se comentó por los propios azules; aquí los colorados nada tuvieron que ver.
Si esto que aquí comentamos, no lo hacen los azules, entonces caerán en el pecado de soberbia; que lo único que provocará es que signa pensando que sus “gallos”, pueden triunfar a pesar de no atender los “focos rojos” que están presentes, son demasiado evidentes.
La victoria nunca es definitiva, lo decimos porque escrito está, a menos que termine con la guerra; y por lo que hemos percibido la guerra interna en el Instituto Político Azul, dista mucho de haber terminado, para algunos apenas comienza; cambia sólo de escenario, ahora será a nivel estatal. Nuevamente se recurrirá a la celebración de alianzas y también se fraguarán traiciones; el fin justificará los medios.
Mientras los azules no logren consolidar la unidad o al menos construyan mecanismos para canalizar y dirimir sus diferencias, mediante el diálogo diplomático; no podrán ser considerados una opción política real; pues, la imagen que transmiten al ciudadano, como Usted y como nosotros, es simplemente que pelean desesperadamente por el puesto y el poder; sin considerar el beneficio que pueden hacer.
Lo que es sumamente importante es que todos los actores políticos del Instituto Azul, se reúnan y reflexionen sobre los acontecimientos de los últimos meses; y decimos los actores y no las cabezas de los grupitos; porque si sólo los grupitos se reúnen, pretenderán simularán una unidad, sin intención de sanar sus heridas.
No pretendemos que la pugna se resuelva en un par de días, sería una pretensión absurda, ni mucho menos que todos cierren filas en torno a una persona, aunque está sea el actual alcalde; no importa que en el pasado así hayan actuado. Las cosas han cambiado y los escenarios políticos no son lo mismo. Las diferencias siempre van a existir, pero insistimos que se debe de construir caminos que acorten la distancia, para que mediante el diálogo, se llegue al acuerdo. Si los azules, son incapaces de esto; mucho menos podrán hacerlo con aquellos que piensan diferente. Todos poseemos una pequeña parte de la Gran Verdad.
Hoy por hoy, el gran enemigo de los azules no son los colorados, mucho menos los amarillos o verdes; son ellos mismos el enemigo a vencer, con el diálogo para construir la Unidad que tanto necesitan; los viejos luchadores deben de enseñar a noveles políticos, desgraciadamente para los azules, todos son noveles que no han comprendido que “Si no acaba con la guerra, no es una victoria”.