jueves, 18 de noviembre de 2010

SI LLEVAS A CABO UNA ACCIÓN VERGONZOSA

“Si llevas a cabo una acción vergonzosa, no esperes mantenerla oculta. Aunque lograras esconderla para los demás, tu conciencia sabría dónde está”. Isócrates. Sabíamos que hablar de la Universidad de Matehuala era tocar fibras sensibles, algunos le consideran un tema tabú. Recibimos varios comentarios, con algunos estamos muy de acuerdo, como son los vertidos por Javier G. Herrera y Eduardo Calderón; ambos realizan comentarios muy centrados.
Estamos de acuerdo en que la información financiera, sólo compete a los socios de la Universidad de Matehuala y a las autoridades fiscales obviamente. Y deben los socios, así como se reunieron para la fundación, ahora deben reunirse para que se dé la rendición de cuentas; en privado y sin tanto jolgorio. La discreción en negocios, es una gran virtud, que se debe apreciar. Cuando el recurso del diálogo es infructuoso, entonces se debe recurrir a los tribunales correspondientes, claro está si es que sienten que sus intereses se encuentran comprometidos o afectados.
Por eso vemos con excelentes ojos el desplegado publicado por Poncho Nava a título personal, cual debe; ya estamos enterándonos que la situación de los socios, no es tan simple. A nosotros nos ocupa e interesa quienes son los socios y sobre todo quienes han perdido tal categoría, porque al parecer son ellos los que se encuentran tras la campaña de desprestigio. Si Juan de las Cuerdas, dice tal o cual cosa, pues no tendría mucho valor o peso; pero si es un socio quien habla, la cosa es totalmente distinta. No nos interesa los porcentajes, ni las cantidades invertidas, mucho menos los beneficios que puedan obtener.
También nos agrada saber la versión sobre lo que el señor Fausto Cuello afirmó, también a través de un desplegado.
Lo que escrito está, es que nos preocupaba que hubiera silencio en determinados temas y demasiado ruido en otros; en el caso de los volantes por ejemplo, consideramos fue demasiado. Lo prudente en este momento, es turnarlo a las autoridades, como se hizo y esperar a que se dicte un veredicto; ¿Hubo delito? ¿Quiénes son los responsables? ¿Cuál es la sentencia? En pocas palabras, que otros hagan el trabajo “sucio”, ¿Para qué dar tanto brinco, estando el suelo tan parejo? Le dieron publicidad.
Estamos de acuerdo, catorce años pueden ser garantía de legalidad. Pero toda institución educativa, debe de actualizar sus planes de estudio, si es que desea estar en la vanguardia y representar una opción de calidad. Las autoridades educativas periódicamente realizan este tipo de actualizaciones. Además, es necesario que el cuerpo docente, sea de competente; teniendo personal con experiencia en el campo laboral y no sólo académica, porque de esos abundan en otras instituciones educativas.
Si la Universidad de Matehuala, cumple con lo legal y además, mantiene un programa de actualización de sus diferentes planes de estudio; así como una planta docente verdaderamente capaz. Entonces no hay necesidad de preocuparse por volantes o desplegados. Y aunque no se encuentre obligada por ninguna ley de transparencia, nada se pierde con publicitar la documentación que les avala, hasta como publicidad les puede servir y más si lo hacen en su portal de internet, pues el costo sería muy bajo.
Lo que toda comunidad requiere es de instituciones, públicas y privadas, sólidas en todas las áreas de la actividad humana. La confianza, lo hemos dicho y escrito está, se pierde fácilmente aunque cuesta demasiado que la gente nos tenga confianza.
Es importante por todo lo anterior, ser cuidadosos. En ningún momento hemos hecho defensa de persona alguna; señalamos la falta de acción de la Universidad de Matehuala, y vemos que al menos ayer se publica la versión de Poncho Nava sobre el tema que señalábamos. También consideramos que se apresuran al señalar instigadores, conspiradores o bien organizadores de la campaña. Que esa tarea sea de las autoridades competentes.
Si estas palabras incomodan, lo sentimos pero es nuestra opinión de unos hechos poco agradables. Las autoridades universitarias, deben de darse un tiempo para valorar si les conviene como institución, dar a conocer la información que en esta edición comentamos.
Las instituciones educativas particulares, siempre han sido vistas como un negocio y pocas tienen responsabilidad social, aunada al compromiso de respaldarse en otros dos pilares como son la investigación y la difusión cultural. Estos dos pilares: la investigación y la difusión cultural junto con la docencia; son los tres puntos básicos que enunciaba Agustín Basave Fernández del Valle, un tapatío avecindado en Monterrey, rector de la Universidad Regiomontana, al menos eso dicen los que saben, en su libro Ser y quehacer de la Universidad.
Esos tres pilares son los que deberían de preocuparnos, al menos eso creemos; pero desgraciadamente lo que pasa en Matehuala, la siempre Bella Perla del Altiplano, es que nos dejamos llevar por los malditos rumores y comentarios de café; para acabar con estos, no nos queda más que acabar de raíz con ellos y no hay otra forma que presentando información.
Con información podríamos acortar tantas discusiones bizantinas, en eso estamos de acuerdo con Eduardo Calderón, si tuviéramos suficiente información varios temas no serían motivo de discusión. Esto aplica para el tema de los parquímetros. Con poca información lo único que generamos es desinformación, por eso seguimos en la búsqueda.
Es una lástima que en lugar de estar planeando acciones que fortalezcan a las instituciones, estemos pensando en quién tiene la razón. Por ejemplo y va el comercial, Fundación ERA nos convoca para una noble acción abrigar a un hermano y no recibió respuesta, tal vez porque estamos más ocupados en otros temas. Los interesados podrán contactarles en Facebook o bien esperemos la segunda convocatoria y en esta ocasión nosotros haremos acto de presencia.
En fin, a final de cuentas nuestras acciones son las que importan, son verdaderamente ellas las que dan soporte a nuestras palabras, son los pilares de nuestra integridad; por eso nos preocupa que se vea con ligereza algunos temas y se señale otros con demasiada insistencia. Si hay algo nocivo, saldrá. No se puede mantener oculta verdad por mucho tiempo. Por ello les compartimos esa frase de Isócrates “Si llevas a cabo una acción vergonzosa, no esperes mantenerla oculta. Aunque lograras esconderla para los demás, tu conciencia sabría dónde está”.